Avisado lector, estos cuentos teológicos y del más allá que aquí esperan a que los lea, aguardan también a que los ría o a que los sonría, si es intelectual. En dos partes se divide esta colección; en la primera encontrará relatos sobre teología, en la segunda sobre los usuarios de las conclusiones teológicas, o sea, nosotros. Para el final, se me ocurrió escribir dos cuentos píos, atraído por la moral de los temas regurgitados y un estrambote
Sobre cosas tan graves como estas se suele hablar en serio y en aburrido. Aquí las atendemos de manera más liviana, pero con todo rigor. Y es que siempre me pareció que alguien capaz de escribir el episodio de la burra de Balaam (Num 22) llevaba dentro serones de risa.